martes, 12 de febrero de 2008

Quién nos defiende de quienes nos tienen que defender

Fundé una Universidad en el desierto. Un sueño que inicie en el año 1990 en Buenos Aires y que atraído por el deseo de capacitación permanente y avidez por servicios educativos de avanzada que presentaba Mendoza, coloque allí la semilla que en el año 1994 y con el aval de Emilio Mignone floreció en Universidad.
Fui el educador del año en 1998 con alumnado que llegó a 2000 alumnos. Un bocado demasiado atractivo en manos de un “forastero” como me llamaron en un anónimo y judío. Fui objeto de una transacción política y en una maniobra conjunta de medios e instituciones fui despojado de este, mi hijo.
Hay miles de indicios y pruebas de un accionar antijudío pero ante la presentación de mi caso ante las autoridades comunitarias siempre la respuesta fue el SILENCIO.
MIS ENEMIGOS SON MUY PODEROSOS.
Presenté el caso ante la Comisión de Derechos Humanos del Congreso sin ayuda de mi comunidad, presenté demandas judiciales también sin ningún apoyo.
Y volví ante las autoridades comunitarias que volvieron a responderme con: SILENCIO. Mi única posibilidad de apoyo fué un convenio particular, por supuesto pago.
Hace 20 días obtuve “la” prueba , un grave error que cometieron mis despojadores.
Uno de los ex alumnos de la UNIVERSIDAD descubrió en la biblioteca virtual recién inaugurada de MI UNIVERSIDAD creada por un judío una oferta de libros de acceso público y para bajar gratis. Mi sorpresa fue mayor cuando me enteré que el primer libro ofrecido es...”MEIN KAMPF” de ADOLF HITLER.
Una provocación de la impunidad que poseen los poderosos.
Con esta prueba en mi poder e ingenuamente fuí a quien correspondía: a mis representantes y ya no me tenía que haber sorprendido su actitud, pero me sorprendió: SILENCIO. – Esto no es “problema judío”. Lo tuyo es comercial. Y vamos a hacer que la gente que tiene los derechos de autor reclame que lo saquen de Internet.- como si eso no fuera una prueba más de las que vengo mostrando hace 4 años. – Ellos no son antisemitas... tienen amigos judíos... hacen negocios con judíos - .
Los únicos que rápidamente se movieron fueron el Centro Wiesenthal y gracias a su gestión este hecho se hizo público para la prensa y para el Dr Jaim Etcheverry que seguía siendo desde mi gestión asesor de la Universidad. Tanto unos como el otro reaccionaron inmediatamente logrando que esa misma noche sacaran estas publicaciones de Internet.
Ahora pregunto: ¿No es esto una prueba suficiente de la ideología que impera ahora en ese lugar? Ser la primera Universidad del mundo que publica como primer libro virtual “Mein Kampf” es un privilegio que me avergüenza como fundador de ella.
Si se denuncia públicamente un libro publicado por Wast como antisemita. ¿Adolfo Hitler lo es menos? O es que estos personajes “amigos de judíos no deben ser molestados por ser demasiado poderosos, o porque tienen negocios con judíos también poderosos ”.
Quien nos defiende de quienes nos tienen que defender?